IMG_0019El anciano horchatero prueba un helado. -Sí, es el mismo sabor de siempre, se dice y vuelve tranquilo a su esquina.
Qué placer le da volver a encontrarse con su reconocido carácter cremoso, con un nítido gusto a lo que el helado dice tener y con el sabor de siempre ¡Si es avellana, que se note!

El lleva muchos años en la misma esquina. Y que cinco generaciones de clientes vengan a  recordar un helado que tienen registrado en su memoria gustativa, no es poca cosa, por eso él es fiel a ese sabor, el que vienen a buscar. A veces llega un viajero que hace treinta años ha dejado el barrio a recuperar colores y sabores de infancia, visita sagrada.
helado al corte de varios coloresIMG_3401Y esto es el Tío Che, un lugar al que siempre se regresa, cargado de sensaciones felices.

Todavía tiene el papel que ha guardado como una reliquia  con la receta del helado que hacían en su casa y éste es el sabor que quiere mantener, aunque a la tecnología se ha de agradecer: hombre, porque le ha echado una buena mano. Sino seguiría dando la vuelta  a las frutas y al hielo horas y horas hasta que se hicieran una crema fría.
La tecnología permite potenciar la naturaleza. Sus helados artesanos llevan productos naturales y de cercanía, los frutos secos, las frutas, las pulpas, la leche y las natas. Cuando se toma un helado de la horchatería se descubre enseguida la densidad del producto, los helados industriales utilizan compresores que le introducen 300% de aire, mientras su helado sólo un 20%. El helado artesano no sólo tiene más calidad sino que lleva más materia prima. Y porque es un combinado de mimos a tope, sabor exquisito y buenas propiedades. Sí, no es una golosina, es un super alimento, y esto va en serio.
En especial los helados de frutos secos: almendras, pistachos y avellanas. Son potentes y sus propiedades se mantienen. El helado de almendras tiene las propiedades de las almendras y la de los lácteos que intervienen en el proceso.

¿Qué aportan las almendras a tu helado artesanal?

almendraFibras, proteínas, grasas, vitamina E, manganeso, magnesio, buenas cantidades de cobre, vitamina B2 ( riboflavina) y fósforo. Además, contiene buenas cantidades de cobre, vitamina B2 (riboflavina) y fósforo. La almendra es una portadora de energía por sus carbohidratos, protectora del sistema cardiovascular por sus aminoácidos y ácidos grasos esenciales omega 6 y 9. Regula la presión arterial y el corazón porque tiene potasio. El hierro que contienen las almendras nos evitará tener anemia. Su contenido en selenio combate los radicales libres, evita enfermedades degenerativas y cuida el corazón.Gracias a su aporte en magnesio nos ayuda a mantener dientes y huesos fuertes, cuida nuestros músculos, combate la ansiedad, la irritabilidad y favorece un buen descanso, evitando el insomnio.Por su contenido en calcio las almendras previenen la osteoporosis.
IMG_7428Son depurativas, la Vitamina E que contienen nos protegen de los radicales libre, el estrés, el envejecimiento, cuidan nuestro sistema circulatorio, su contenido en fibra facilita el tránsito intestinal regular y nos hace sentir saciados,
Son ricas en proteínas vegetales. Contienen Vitamina A que fortalece el sistema inmunitario y desintoxica el organismo
y vitaminas del grupo B (B1, B2, B5, B6, B7 y B9) que evitan migrañas, ansiedad, insomnio, estres, y cuidan la vista, el cabello, uñas y piel o incluso regulan el azúcar en sangre.
El  zinc mejora el funcionamiento del sistema inmunitario, favorece el crecimiento y combate los estados de fatiga o cansancio. El contenido en fósforo  nos ayuda a tener mayor resistencia física y mental, además de cuidar del buen funcionamiento de nuestro sistema nervioso

¿Y qué aportan las avellanas a tu helado artesanal?

Los helados de Avellanas también tienen lo suyo, además de su exquisito sabor cremoso e intenso. Cuidan el sistema cardiovascular, combaten la fatiga física y mental y mejoran las defensas. Son un tipo de fruto seco como la almendra, originarias de Asia.
IMG_8811Su valor nutricional es muy alto, están compuestos por grasas omega 9, proteína vegetal, carbohidratos y son una buena fuente de fibras, aportan vitaminas B9 o folatos, E o tocoferol, A B3 o niacina y C o ácido ascórbico. Entre los minerales se destacan el potasio, fósforo, calcio, magnesio, sodio, selenio, hierro, zinc y yodo. Uno de los aminoácidos, proteínas vegetales es la arginina que aporta al buen funcionamiento cardiovascular, buenas defensas y formación de tejido. Estabilizan el ritmo cardíaco, previenen la hipertensión cuidan los vasos sanguíneos y vasodilatan. Previenen la anemia ferropénica, mejoran la memoria y el rendimiento intelectual.
Previenen daños neuronales en el feto, aportan a la formación de glóbulos blancos, y hacen un aporte importante en antioxidantes. Reducen los picos de glucosa en sangre y estabilizan los niveles. Disminuyen los síntomas premenstruales. Combaten la debilidad del funcionamiento neurológico. El tipo de grasas de los frutos secos regula los niveles de colesterol y triglicéridos, aumentando el colesterol bueno. El consumo de frutos secos se relaciona también con un menor riesgo de padecer diabetes e incluso algunos tipos de cáncer.
Un buen helado artesanal con frutos secos, en la medida que sus materias primas sean de gran calidad,  para los niños es una fuente muy saludable de energía, rápida y fácil de comer, mucho más saludable que cualquier pieza de bollería.

¿Has probado nuestro helado artesanal de pistacho?

Con una sola taza de pistachos obtienes el 60 por ciento del valor diario recomendado de fósforo mineral. Además de liberar las proteínas en aminoácidos, el fósforo ofrece una ayuda extra en la intolerancia a la glucosa. Son una fuente increíblemente rica de vitamina B6, responsable del transporte de oxígeno en la sangre. Actúa sobre el sistema nervioso, tanto en la creación de aminas como en la formación de mielina, encargadas de la mensajería entre los nervios. Los pistachos contienen dos carotenoides que no se encuentran en la mayoría de los frutos secos. La  luteína y zeaxantina, funcionan como antioxidantes protectores, en la defensa de los tejidos contra el daño provocado por los radicales libres. Su consumo se ha relacionado  con una disminución en el riesgo de desarrollar una enfermedad ocular relacionada con la edad, llamada degeneración macular, que es la causa principal de discapacidad visual y ceguera. La vitamina B6 que se encuentra en los pistachos también ayuda a nuestro organismo a producir glóbulos rojos sanos y a mantener la salud en nuestras glándulas linfoides, como por ejemplo, el timo, el bazo y los ganglios linfáticos, lo que garantiza la producción de glóbulos blancos de la sangre que defienden al cuerpo de las infecciones. Son una fuente de vitamina E, un antioxidante liposoluble, esencial para mantener la integridad de las membranas celulares. La vitamina E realiza una excelente labor protegiendo nuestra piel de los rayos UV y proporcionándonos la defensa diaria contra el envejecimiento prematuro y el cáncer de piel. Es también un alimento muy rico en magnesio, potasio, fibra y hierro.

Entre las propiedades nutricionales del pistacho cabe también destacar que tiene los siguientes nutrientes: proteínas, calcio, yodo, zinc, carbohidratos, sodio, vitamina B2 ,B3, B5, B9, B12, C, D, K, fósforo. Su alto contenido en hierro hace que el pistacho ayude a evitar la anemia ferropénica o anemia por falta de hierro. Ideal para personas que practican deportes para evitar el desgaste de hierro. Es rico en potasio, por tanto regula  la presión arterial. Ayuda a favorecer el tránsito intestinal. Incluir alimentos con fibra en la dieta, como este fruto seco, también ayuda a controlar la obesidad. Por su alto contenido en vitamina B1, el consumo del pistacho, ayuda a superar el estrés y la depresión. El pistacho, por su elevada cantidad de vitamina E, es un alimento beneficioso para nuestro sistema circulatorio. Este fruto seco también tiene propiedades antioxidantes, es beneficioso para la vista y puede ayudar en la prevención de la enfermedad de Parkinson.

5-generacion-irene-iborra-2Un verdadero helado artesanal, cuya base es la leche (helados de crema) y materias primas de primera calidad,  es un buen alimento para niños, adolescentes, embarazadas y ancianos, por su aporte de proteínas de alto valor biológico.
El Departamento de Nutrición y Bromatología de la Facultad de Farmacia de la Universidad de Barcelona, dice que si se lo incluye en la dieta diaria aporta proteínas y calcio.  Dicho trabajo de investigación, a cargo del equipo que lidera Abel Mariné (Director del DNB de la Universidad de Barcelona) y solicitado por la Asociación Española de Fabricantes de Helados (AEFH) concluye en que el helado «es un buen alimento».

El estudio señala que tiene todas las vitaminas, que su calidad es óptima por la leche y fruta que llevan,
Asimismo, se pone el acento en los «falsos mitos» aclarados por el estudio. El helado «no causa daño a la garganta ni al aparato digestivo» porque en la boca, se atempera llegando al estómago a la propia temperatura corporal. La única precaución es no tragarlo con excesiva rapidez.
Además, su cantidad de azúcar – energéticamente útil – no se considera excesiva, como tampoco su riesgo de provocar caries o dolor de cabeza migrañosa.

Pues, que sin culpa alguna, a disfrutar de los mágicos helados, que además, dan felicidad.
Según un estudio realizado por el Instituto de Psiquiatría de Londres comer helados aporta felicidad.
El estudio realizado a través de resonancias magnéticas funcionales comprobó científicamente que el consumo de helados activa ciertas zonas del cerebro asociadas al placer y la felicidad. Una cucharada de helado activa el mismo centro cerebral de placer que se activa al ganar dinero o escuchar tu música favorita. Además de su textura cremosa y variedad de sabores, se han preguntado, ¿por qué el helado nos hace sentir bien? Generalmente siempre después de comer helado se nos sube el ánimo y quedamos de buen humor y según los investigadores del Centro Médico de la Universidad de Maryland esto tendría una explicación científica. De acuerdo a los resultados de un estudio, los helados contienen triptófano, un aminoácido que reduce la agresividad y ayuda a lograr la calma. A su vez, también aumenta la producción de serotonina, conocida como la hormona de la felicidad, la que ayuda a relajarnos y a dormir mejor, combatiendo el estrés. Además, según Jane Jakubczak, dietista de la Universidad de Maryland que también participó en el estudio, está helados-7demostrado que muchas veces elegimos alimentos según nuestro estado de ánimo, siguiendo a nuestro «apetito emocional». Cuando estamos tristes optamos por las galletas y los helados.

Así que a comer helado para ser más felices… Pero que sean artesanales, con materias primas nobles y frescas. ¡Y que no sean puro aire! Un buen helado tiene una consistencia homogénea y densa que se mantiene en el paladar. Palabra del anciano horchatero!