Llega el cumpleaños de tus peques. Alegre de verlo crecer, pero esto de la fiesta es un rollo, cuanto más grande más amigos, ya no es un bebé, le va la marcha y la creatividad se agota. ¡Al lío! Aquí van algunas ideas para que se lo pasen bien y más.
La momia. Para jugar mientras llegan los invitados.Se envuelve a uno de los niños con vendas (podemos usar un rollo de papel higiénico) y el siguiente invitado en llegar a casa ha de adivinar de qué niño se trata. Si acierta, lo disfrazaremos a él en su lugar y seguiremos el juego hasta que hayan llegado todos los niños. Si no queremos gastar mucho papel, podemos ocultar solo la cara de la momia, dejando un espacio para los ojos.
Enanos y gigantes. ( De 4 a 8 años). Cuando se dice enanos , los niños se pondrán en cuclillas. Al decir gigantes tendrán que ponerse de pie. Se dirán cada vez más rápido las palabras, para que se muevan. El que se equivoca deberá cantar una canción.
Dibujar a ciegas. Con los ojos vendados, los niños han de estar sentados a la mesa (mejor con un mantel de papel), con un papel y un lápiz. Quien coordina nombrará algunos objetos, y los niños deberán dibujarlos. Cuando les quitemos las vendas, seguro que se divierten viendo lo que han hecho.
A buscar al extraterrestre. Al principio de la fiesta, avisamos a los niños que un extraterrestre se ha llevado algo de la casa (un tesoro, la tarta de cumpleaños o un regalo para cada uno de ellos). Les enseñamos las huellas que ha dejado en algún lugar de la casa. Vamos dándoles pistas y al final podrán encontrar el tesoro escondido.
Encontrar un objeto en la caja. Jugamos a cazar objetos en una caja grande. La llenamos con objetos como vasos de plástico, cromos, bolígrafos, coches, peluches. Debe haber tantos objetos como invitados al cumpleaños menos uno. Se pone música para que los niños bailen, y cuando se detiene han de ir a la caja y sacar un objeto. El niño que no lo consiga, quedará fuera del juego. Sacamos un objeto de la caja y repetimos. Así hasta que queden uno o dos niños y les demos un premio al final.
El cajón de las palabras. Sentamos a todos los niños en el suelo y uno de ellos comienza diciendo tengo un ratón dentro de una caja. El siguiente niño ha de repetir la frase, pero diciendo un objeto que comience con la siguiente letra del abecedario, sin repetir palabras ya dichas, en este ejemplo b. (Tengo un ratón dentro de un botón) Si en 30 segundos no se dijo una palabra se descalifica al jugador y seguimos algunas rondas más. Gana el último jugador sin fallar.El juego puede hacerse también con frutas, sin seguir el alfabeto, para los más pequeños. (ej. Tengo una manzana dentro una caja)
Cambio de nombres. Se trata de que durante toda la fiesta o actividad recreativa, los jugadores deben cambiar de nombre. Y deben ser llamados así hasta que la fiesta termine. Si alguien llama a otro jugador por su verdadero nombre, paga una penitencia que le impone el jugador a quien nombró mal. Este juego produce muchas risas y da un toque de mucho humor a su fiesta.Pueden elegir nombres de personajes de cuentos: caperucita, el hada madrina, el gato con botas; o nombre de santos, etc.
Recetas sencillas y saludables Sí, porque además de jugar arrasarán con todo lo que pongas a la mesa. Cualquier fruta puede ser la materia prima para hacer un verdadero cuadro en las bandejas, y los niños se servirán su ración con la mano. Podemos usar solo una o combinar varias, y en ese sentido el verano es la estación ideal.
La langosta está hecha exclusivamente con sandía. Los ojitos pueden ser hechos con uvas verdes, y la pupila con una gragea pequeña de chocolate.
Rana de fruta Las frutas grandes como la sandía o el melón son perfectas como recipiente para presentar la macedonia en las fiestas. Hay que hacer un corte en forma de gajo que será la boca, luego vaciar el melón con la cuchara para hacer bolitas, y mezclar la pulpa con otras frutas para la macedonia. Las patas y los ojos están recortados en la cáscara del melón del trozo que hemos cortado para hacer la boca.
Gusano de fruta Gusanitos hechos con peras y manzanas. Solo debemos cortar la fruta en rodajas, dividirlas en 4 y alinearlas una al lado de la otra para hacer el cuerpo. Las antenas son de zanahoria rallada y arándanos, los ojos frutos rojos secos o pasas de uva, la boca un trozo de fresa o mora.
Sandwichs loquillos Divertidos, sólo hace falta un molde para cortar el queso en forma dentada, y otro para recortar redondos los panes. El jamón se dobla en dos, y puedes agregarle mayonesa de zanahorias, mayonesa común, o queso crema.
Horchatas de chufa, helados al corte, leche merengada Y para que la fiesta sea de verdad saludable, en lugar de bebidas dulces y artificiales te sugerimos des a los peques horchata de chufa, les gusta y hace bien. Hay niños que prefieren la leche merengada, y puedes llevarla en envases de litro, y litro y medio. Los helados no pueden faltar en ninguna fiesta infantil, te sugerimos helados al corte y cerrarlos con galletas en formas divertidas. También los puedes mezclar con frutas de diferentes sabores y algun sirope o chocolate líquido.
Ciempiés cumpleañero Y para seguir con el rollito insectívoro te damos una receta muy fácil. Sólo tienes que preparar sandwiches integrales y de pan blanco, y con un cortapastas redondo, recortarlos con fuerza para que nada escape al corte certero de los moldes. Puedes ponerle dentro lo que quieras: queso y jamón, atún, mantequilla y queso, granos de maíz, queso y untarlos con mayonesa. (recuerda que a los niños les gustan los sabores suaves, aunque algunos son de fuet). Luego colócalos formando una espiral uno de pan integral, uno de pan blanco, uno de integral, y así sigues. Las patitas son pasas y la cara del ciempiés se hace con un tomate, un par de trozos de calabacín unas hojitas de menta. Dos palillos serán los cuernos del bichito.
Pues, manos a la obra, si quieres puedes enviarnos fotos del cumpleaños así nos inspiramos y te damos nuevas ideas para el próximo. ¡Ánimos y creatividad!