El horchatero ve pasar a los vecinos con las maderas para la fogata. A quemar todo lo viejo ¡apa! Sant Joan es fuego, agua, y buenos deseos. Sant Joan es cocas, cava, familia y amigos. Sant Joan es encantamiento. Un buen momento para soltar lo que nos trajo pupas, votar por el amor, la paz y la prosperidad. Sant Joan es noche de horas escasas y grandes deseos. La noche más efímera del año, tal vez por eso tan esperada.
¿Para qué encendemos hogueras?
El rito de las hogueras era para dar más fuerza al sol, porque a partir de junio los días se hacen más cortos hasta el solsticio de invierno. Y puestos a encender queremos purificar, a quién le sirve cargar con negatividades que ensombrecen las ciudades, los barrios, la vida. No somos los únicos incendiarios, se celebra el Sant Joan en España, Portugal, Dinamarca, Suecia, Finlandia, Estonia y Reino Unido, y en casi toda Latinoamerica, a seis meses antes del nacimiento de Jesús, de 24 de junio al 24 de diciembre. Tampoco somos los únicos que elegimos el agua como parte del ritual. El agua considerada como una fuente virtuosa, en esa noche se le adjudican poderes sanadores. En la antigüedad el baño era un ritual obligatorio, y en la costa, es muy común, por el calor que hace y por las creencias de que se lleva los feos, de una vez.
¿Cómo celebramos en España?
Moragas, estufas, hogueras y Juás, que son unos muñecos de trapo se van quemando lentamente en la playa de Málaga durante toda la noche. Y si no te bañas en el mar al menos te mojas los ojos para levantarte más bello al otro día.Si vivieses en Motril harías un reparto igualitario de lo bueno y de lo malo: tirarías tres deseos escritos al fuego y tres al mar, para que el agua los lleve bien lejos. Lavarse la cara con agua de mar y pétalos de rosa te embellecerá, pues, que vivan las rosas.

Aquí viven las Xanas
Los asturianos celebran, como buenos celtas, el culto al agua y al sol. No hay fuente, río o playa que no se llene de gente que cree que esa noche tierra y agua serán bendecidas y el agua les dará una vida saludable. Pero eso no alcanza, hay que rendir culto, a modo de refuerzo, a las xanas, cuélebres y trasgos, personajes de la mitología asturiana.
pero también pueden hacer desaparecer en sus dominios a los curiosos o encantar hombres y mujeres para siempre.
En Alicante se celebra al estilo Fallas Valencianas. Con el pregón, que tiene lugar el viernes anterior a la plantà, comienzan los festejos. Durante tres días se plantan las hogueras al modo de las fallas, con humor, con sátira y con arte. Se queman después de lanzarse una monumental palmera de fuegos artificiales desde el monte Benacantil, en el Castillo de Santa Bárbara por su buena visibilidad. Desfiles, pasacalles, despertás, ofrendas de flores a la patrona de Alicante, cabalgatas, mascletás, música, deportes, fiesta de la buena y en la calle. No falta cocas con atún y las brevas. Además del fuego, los bomberos regalan manguerazos, la bañá.
En Nájera, La Rioja la gente sale al son de una charanga en recuerdo a las tropas isabelinas cuando volvían de sus victorias sobre los carlistas. El acto más llamativo y multitudinario son las “Vueltas” en las que miles de personas salen a la calle para cantar y bailar al son de una charanga recordando el acompañamiento que se hacía a las tropas isabelinas cuando volvían de alguna victoria sobre los carlistas. Son una de las fiestas más multitudinarias de toda la comunidad riojana.

Sant Joan en Tolosa
En Tolosa , Guipúzcoa las fiestas de San Juan celebran la fiesta patronal, el 23 a las 12:00 se tira el «chupinazo» y por la noche se celebran la tradicionales hogueras. Por la mañana del 24 las distintas sociedades gastrónomicas de la ciudad preparan almuerzos para los escopeteros, dantzaris , músicos y gigantes. Luego hay un recorrido por las calles de Tolosa y finalmente se dirigen al ayuntamiento, donde la música y el baile continúan.
En Barcelona la celebración de Sant Joan es muy antigua, sobre todo con la presencia central de las hogueras, porque es una creencia común que las llamas alejan y asustan a los malos espíritus que campan durante esta noche. De hecho, en el siglo XVIII ya se dictaron leyes que pretendían poner freno a los fuegos artificiales y a las hogueras dentro de la ciudad, lo que hace suponer que entonces la tradición ya estaba muy asentada. Pero la fiesta se ha mantenido hasta hoy pese a las prohibiciones y las restricciones durante el siglo XX. La fiesta y la identidad, porque ese día se lleva la flama del Canigó desde el castellet de Perpignan, donde el fuego nunca se apaga, hasta Canigó, sin dejar un rincón sin encender. En moto, en coche, en bici, en camión, caminando, la llama va.
El horchatero centenario lo va a celebrar en su esquina de siempre, pero pide que recojamos un papel en la horchatería (hay para todos y todas) y lo llevemos a la hoguera en su nombre, quiere que se quemen los malos recuerdos del año, pero que también se pidan tres deseos para Poblenou:
Que vuelva la armonía, el bienestar y la paz a nuestro barrio y que la magia de Sant Joan nos renueve la alegría de vivir en el lugar que hemos elegido.
Que la fiesta sea buena, familia.